Ansiedad y ataques de pánico
La ansiedad es considerada una emoción que todo el mundo experimenta ante una situación de incertidumbre y amenaza, prepara a las personas ante escenarios que puede tener un resultado negativo, es adaptativa y buena, el problema esta cuando se convierte en patológica y se manifiesta en un grado intenso y con frecuencia.
Esto bloquea al individuo y le lleva a un resultado peor del deseado, donde se compromete su salud física y mental, según expertos existen formas de controlar la ansiedad cuando esta es preocupante. El uso de medicamentos no es una buena opción, es necesario apostar por la terapia cognitivo conductual.
Consejos útiles
Existen una serie de pasos que las personas deben seguir para superar la ansiedad, estos son:
Conocer que es la ansiedad y sus síntomas: Existen personas que desconocen que los síntomas que padecen están causados por la ansiedad, el primer paso para recuperar es darse cuenta de los síntomas, taquicardias, sudor, aumento de temperatura, dificultad para dormir, molestias digestivas, entre otros. Es necesario conocer los factores causantes e informarse de que son las emociones y la ansiedad.
Reinterpretar el problema: La ansiedad hace que las personas anticipen consecuencias negativas por si acaso se producen, cano aconseja, interpretar la amenaza de forma menos grave, ser realistas y no magnificar. Razonar si la posibilidad de que ocurra lo peor es tan grande, poner atención a los problemas cuando se pueda hacer algo, cuando no hay nada que hacer, se debe seguir la vida normal y atender otras cosas.
Desviar la atención del problema: Cuando existe la ansiedad la atención se centra en el problema, no se deja de pensar en lo que es preocupante, la persona debe aprender a relajarse, a no centrar su atención solamente en el problema, estar alerta, pero también descansar y guardar recursos cuando no se pueda hacer nada. Es necesario pensar en otra cosa, obligar a hacer algo diferente para distraerse.
Interpretar los problemas como un desafío, no como una amenaza: El interpretar las dificultades como un desafío, en vez de una amenaza, afrontando la situación con motivación, dejando a un lado las preocupaciones.
Técnicas de relajación: Estas pueden ser muscular progresiva, respiración, imaginación, entre otros, con esta se reduce la activación fisiológica, se sueltan los músculos, como indica la conveniencia de hacerlo todos los días. Cuando se ponen en practica estas habilidades, los problemas empiezan a resolverse, el paciente se da cuenta de sus errores y los corrige, se alivia de los problemas.
¿Qué se debe hacer ante un ataque de ansiedad o pánico?
Cuando una persona sufre de ataque de pánico, la ansiedad se descontrola, y se asusta ante el descontrol, el ritmo cardiaco aumenta, la respiración se dificulta, existe la hiperventilación, aumenta la temperatura y el temblor.
El sistema nervioso se acelera, se debe tranquilizar trasmitiendo la sensación de que no hay peligro, que no existe una situación extrema y que lo que sucede no es grave, al cambiar el foco de la atención, la importancia que le damos a los síntomas del ataque de pánico, estos disminuyen.